¿Puede el SAT ver lo que estoy firmando si uso mi e.firma (antes FIEL)? ¿Si pierdo mi Firma Electrónica alguien podría hacer mal uso de ella? ¿La Firma Electrónica es fácil de tirar en juicio? 

Estas y otras preguntas son comunes de escuchar en las demostraciones gratuitas que hacemos en DigitaFirma.

La Firma Electrónica es una alternativa novedosa a un proceso que ha permanecido casi inmutable desde hace cientos de años:

La firma de documentos de manera autógrafa.

Es por esto que es normal que existan dudas, confusiones y hasta mitos sobre Firma Electrónica.

En esta publicación desmitificaremos 5 de los mitos más comunes sobre Firma Electrónica. 

Recordemos que la e.firma (antes llamada FIEL) es el Certificado de Firma Electrónica Avanzada expedido por el SAT en su carácter de Autoridad Certificadora.

Conoce más: ¿Qué es la Firma Electrónica Avanzada?

¿El SAT puede ver lo que firmo con mi e.firma?

No. No es jurídica ni técnicamente posible que el SAT conozca el contenido de un documento por el simple hecho de firmarlo con tu e.firma.

Jurídicamente, uno de los principios de la Firma Electrónica Avanzada es la confidencialidad, de manera que la Firma Electrónica Avanzada en un documento electrónico solo puede ser cifrada por el firmante y el receptor del documento.

Además, uno de los requisitos para que una Firma Electrónica sea Avanzada o Fiable es que sea creada utilizando archivos bajo el control exclusivo del firmante.

En otras palabras, sería ilegal que el SAT pudiera conocer el contenido de un documento firmado por el simple hecho de haber sido firmado con e.firma, pues tendría que ejercer cierto control sobre los archivos de la e.firma, con lo cual la Firma Electrónica dejaría de ser Avanzada.

Ahora bien, a nivel técnico tampoco es posible que el SAT conozca el contenido de los documentos que firmes con tu e.firma.

El procedimiento de validación de certificados se lleva a cabo a través de un protocolo utilizado únicamente para obtener en tiempo real el estado actual del certificado digital.

El protocolo llamado OCSP (Online Certificate Status Protocol) asegura que el SAT solamente recibe una solicitud de validación de la vigencia del certificado de e.firma utilizado, garantizando que se encuentra vigente y no ha sido revocado. 

En dicha solicitud de estatus, el SAT no puede recibir, analizar, pronunciarse, o revisar de ninguna manera el contenido del documento firmado.

¿Únicamente puedo usar mi e.firma para trámites con el SAT?

No. No existe restricción para que utilices tu e.firma para firmar documentos privados o para trámites ante otras dependencias gubernamentales.

Por la misma razón por la cual el SAT no puede ver tus documentos firmados con e.firma: los datos de creación de la Firma Electrónica Avanzada, los archivos con terminación .Cer y .Key, deben estar bajo el control exclusivo del firmante.

Si el SAT impusiera restricciones sobre qué puedes usar tu e.firma, esto podría interpretarse como un control sobre los datos de creación de la Firma.

Entonces, la e.firma dejaría de ser una Firma Electrónica Avanzada y no sería válida para trámites fiscales conforme a la ley actual.

De igual forma, es importante considerar que los Términos y Condiciones de Uso de tu e.firma, los cuales firmas al tramitarla.

En dicho documento se establece que el uso de tu Firma Electrónica Avanzada queda bajo tu exclusiva responsabilidad.

Si pierdo mi e.firma, ¿alguien podría hacer uso indebido de ella?

Si pierdes  o te roban tu e.firma, los archivos se dañan, olvidas tu contraseña o sospechas que alguien pudiera estar usándola sin tu autorización, debes revocarla de inmediato

El proceso de revocación de e.firma puede realizarse en línea o de manera presencial.

Toma en cuenta que para revocar tu e.firma en línea deberás contar con tus archivos .Cer y .Key, así como tu contraseña, por lo que si perdiste tu e.firma, alguno de los archivos se dañó u olvidaste tu contraseña, tendrás que realizar la revocación de manera presencial en cualquier oficina del SAT.

Una vez revocado tu Certificado de Firma Electrónica Avanzada, tu e.firma anterior automáticamente dejará de funcionar y te darán una nueva, por lo que si alguien más intenta utilizarla ya no le será posible firmar.

Esto es una ventaja de seguridad de la Firma Electrónica Avanzada sobre la Firma Autógrafa, ya que si alguien falsifica tu firma realmente no hay un proceso técnico que impida que esa persona siga utilizándola para cometer fraudes.

¿La Firma Electrónica Avanzada es fácil de tirar en juicio?

Existe el mito de que los jueces y abogados en México no están familiarizados con el uso de Firma Electrónica y que por eso es más fácil que la rechacen en juicio.

Esto, principalmente, es un prejuicio. Primero que nada, hay que decir que tanto jueces como abogados litigantes en años recientes han estado en mayor contacto con distintas Firmas Electrónicas, no solo con la e.firma expedida por el SAT.

Por ejemplo, la FIREL es la Firma Electrónica Certificada del Poder Judicial de la Federación, existe desde el año 2013 y su uso en juicios del ámbito federal se ha impulsado especialmente en el último año como alternativa a las restricciones impuestas por la pandemia.

De igual forma, los Poderes Judiciales de diferentes Entidades Federativas ya cuentan con Firmas Electrónicas para ser utilizadas en juicios y trámites del ámbito local, tal es el caso del Estado de México, la Ciudad de México y los estados de Guanajuato, Hidalgo y Baja California, por mencionar algunos.

Además, incluso si te encontraras con un juez no familiarizado con Firma Electrónica, existe un principio general de Derecho que puedes utilizar a tu favor:

El desconocimiento de la Ley no te exime de su cumplimiento.

Existe amplia y robusta legislación que confirma de manera expresa que los documentos electrónicos firmados con Firma Electrónica son válidos como prueba en juicio.

De igual forma, la ley es muy clara en que la Firma Electrónica tiene el mismo valor probatorio que una firma autógrafa.

Conoce más: Firma Electrónica como Prueba en Juicio en México

¿Es complicado firmar con Firma Electrónica?

Mis primeros acercamientos con Firma Electrónica como abogado fueron realizando trámites en línea ante diferentes dependencias gubernamentales por allá del año 2015.

Recuerdo haberme encontrado con procesos complicados. Había que descargar una versión específica antigua de Java. Tenías que utilizar ciertos navegadores tales como Internet Explorer o Mozilla Firefox. 

Tenías que desactivar configuraciones de seguridad, utilizar una ventana de incógnito, descargar y ejecutar un programa y un largo etcétera de cosas complicadas.

¿Te digo un secreto? Estas complicaciones se deben a deficiencias de los portales en línea de las dependencias gubernamentales en México.

Estas complicaciones no las encontrarás en DigitaFirma. Para utilizar DigitaFirma no necesitas descargar ningún programa adicional, todo el proceso se realiza directamente en el sitio web de DigitaFirma.

Firmar en DigitaFirma es muy sencillo, con 3 simples pasos puedes empezar hoy a firmar documentos:

  1. Carga tu documento en PDF.
  2. Invita a los firmantes a que firmen utilizando su e.firma.
  3. Descarga y guarda una copia de tu documento firmado.

Utilizar Firma Electrónica se ha simplificado en años recientes, no se requieren grandes conocimientos de computación.

La relación costo-beneficio de tomarse 20 minutos para aprender lo básico sobre cómo firmar electrónicamente es increíble.

Solo imagínate cuánto dinero y tiempo pierdes en impresiones, traslados, envíos, almacenamiento y demás logística alrededor de una firma autógrafa.

Una vez que empiezas a firmar electrónicamente, es difícil volver atrás a las firmas tradicionales.

¿Listo para empezar a firmar? Regístrate gratis en DigitaFirma y empieza hoy a firmar documentos con Firma Electrónica Avanzada y Constancia NOM-151.

Author

Consultor legal para empresas y emprendimientos tecnológicos, con una amplia experiencia en asuntos relacionados con contratos, due diligence y operaciones corporativas. Graduado Magna Cum Laude de la Licenciatura en Derecho con especialidad en Derecho Internacional por la Universidad de las Américas Puebla.

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